viernes, 1 de febrero de 2013

México será una Potencia de Primer Orden en el Siglo XXI























Los Estados Unidos Mexicanos como nación ha llegado el momento de avanzar en forma decidida, hacia su pleno desarrollo y crecimiento en todos los órdenes, para darse el bienestar y seguridad que por tantos años a trabajado y luchado por obtener..

Se espera que el Gobierno Federal en turno, será el que arranque con la política de estado soberana e independiente dentro de la libertad que se ha alcanzado como país en el concierto de las naciones, para implementar el Proyecto de Gran Visión  que durante algunos años ha estado proponiendo el equipo de Trabajo de esta Institución

Nosotros hemos demostrado, que es una falacia la carencia de agua para uso agrícola  industrial y para servicios domésticos, como se nos ha venido diciendo siempre.

En México, tenemos dos problemas a nivel nacional en relación con el agua potable
.
El primero es la terrible y escalante sequía que perennemente se padece en el norte.

El segundo son las destructivas inundaciones que anualmente se sufren en el sur-este.

De lo anterior se deriva que podemos y vamos a resolver parte de esta sequía en el norte de México  implementado como actualmente ya lo hizo la República Popular de China, mediante una redistribución, canalizando y entubando algunos de sus ríos, que también anualmente causan dramáticas inundaciones en la parte baja de China (y cuyas aguas de esos ríos se descargan en el mar) hacia el norte seco y árido que planean convertir en su granero y de esta manera tratar de ser auto-suficientes en el renglón alimentario básico que una agricultura bien planificada les puede derivar en el futuro inmediato.

Para México, el recurso agua que tenemos es un ASUNTO DE SEGURIDAD NACIONAL y que si la República Popular de China ya demostró que se puede hacer este tipo de trabajos de gran envergadura, México a su nivel y dentro de sus posibilidades financieras; esta obligado a efectuarlas ya que de no hacerlo las consecuencias a muy corto plazo son impredecibles en cuanto a la soberanía y rectoría independiente como nación.

Además para este tipo de obras se puede recurrir a la inversión extranjera.

Una vez implementada esta Red Nacional de Hidroductos operada en su mayor parte por GRAVEDAD, la conducción del recursos hídrico se logrará mas soberanía y riqueza.

Al quedar inter-conectados los ríos y las presas que están ubicadas en las laderas de las sierras del lado del Océano Pacífico, se harían emporios agrícolas, agropecuarios, industriales y de servicios en los estados de Sinaloa y Sonora.

Y por fin podemos llevarle agua a la península de Baja California, que carece de la misma y cuyas ciudades del norte como son Mexicali y Tijuana dependen de la dotación del Río Colorado, que mediante Tratado Internacional se tiene con Estados Unidos de Norteamérica y que cada año es motivo de múltiples problemas y reclamaciones; aspecto que automáticamente volveríamos a nuestro favor, ya que estaríamos en posibilidades de venderles  agua tanto por el litoral del Pacífico como por el lado del Golfo de México, misma que en cantidades kilométricas hemos venido desperdiciando por muchos años al derivarlas en su mayor parte a los océanos del Pacífico y del Golfo de México.

En México ya hemos hecho lo mas difícil como son las dos grandes obras al conducir y elevar el Agua del Sistema Cutzamala a la Ciudad de México y también las de elevar el agua del Río Colorado para el abastecimiento de la Ciudad de Tijuana.

La Red Nacional de Hidroductos en su mayor parte se conduciría el agua por gravedad por el lado de los litorales, para aprovechar la cercanía del nivel del mar, teniendo a las Grandes Presas de que ya disponemos como puntos de partida; como son las de Chiapas y las del litoral del Pacifico, que funcionarían como Elevados Tinacos para que la gravedad y los sifones a lo largo del trayecto de los hidroductos hagan su trabajo y así evitarnos al máximo la elevación por medios mecánicos del líquido elemento de que hablamos.

Muy importante y bajo la Autoridad del Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, estará que formalice la modificación a la Ley Federal de Aguas mediante la expedición de un Decreto, para que pueda trasvasarse ésta de una Cuenca a Otra en el Territorio Mexicano, aspecto que perjudica al crecimiento y desarrollo de la Nación Mexicana, pues   actualmente no lo permite dicha Ley.

Ademas este proyecto es mexicano y demuestra que no es necesario traer agua de Alaska, Canadá o Estados Unidos y pagar por ella como otros lo están proponiendo; pues la tenemos en abundancia y solo es necesario redistribuirla.

Invitamos a nuestros visitantes a esta página, a ver los siguientes puntos de contacto que están relacionados con este tema para mayor abundamiento, comprensión, entendimiento y viabilidad de nuestra propuesta.







  
Continuará...