CIENCIA
CAMBIOS CLIMÁTICOS
PRODUCIDOS POR FENÓMENOS
CÓSMICOS
INTRODUCCIÓN:
El presente ensayo sobre la investigación de los cambios climáticos, marca un parte-aguas en la forma o lectura con la que debemos conocer, entender y comprender la información contradictoria que a diario los diferentes medios de comunicación nos proporcionan, observándose en forma increíble como existen dos bandos de científicos a nivel mundial que se disputan la posesión de la verdad.
En vista de que una parte argumenta que el planeta parece encaminarse nuevamente hacia una nueva edad de hielo y que debemos olvidarnos del temor por el calentamiento de la tierra, por lo que nos vamos a ver forzados a derribar todos los árboles disponibles, quemar todo el carbón y utilizar los automotores a base de hidrocarburos y crear a propósito el efecto invernadero y de esta forma en parte protegernos del glacial frío y sus multiplicadores fenómenos que nos afectarán.
Otros, por el contrario, están con una posición diametralmente opuesta y son los que al parecer, cuentan con mayores adeptos a sus argumentos; al grado de que a nivel mundial han encontrado apoyo y consenso en los líderes políticos mundiales que han establecido normas cada vez más rígidas y precisas en todo tipo de emisiones a la atmósfera, la tierra y el agua de todo el planeta, y cada vez mayores grupos humanos, están siendo obligados a aceptar estas normas, la mayor de la veces contra sus posibilidades económicas y tecnológicas de poder hacerlo y contra su voluntad.
Mientras tanto el tiempo sigue corriendo, los registros de la temperatura, que desde aproximadamente el año de 1860 a la fecha, indican que la temperatura se ha venido gradualmente incrementando y según indican los meteorólogos, el incremento ha sido de 0.6 grados Celsius con relación a la de fines del siglo pasado, pero otros hacen un desmentido, afirmando que con las últimas mediciones mediante satélites meteorológicos la situación no es alarmante y que no es cierto que muchas de las más importantes ciudades costeras del mundo pudieran verse inundadas por efectos de los des-hielos de las masas polares, debido al calentamiento global del planeta, en el corto plazo, aunque algunos aceptan, que esta situación pudiera presentarse, hasta dentro de 100 a 150 años.
Tal parece que la humanidad estamos en un callejón sin salida con este tipo de informaciones, en la que los expertos no se ponen de acuerdo y precisan la causa de estos fenómenos.
Por esta razón y después de analizarlo y meditarlo, es que he determinado poner a consideración de la comunidad en forma serena, con humildad y seriedad, la información encontrada en los registros históricos que nos legaron nuestros antepasados, quienes narran y detallan, las causas de los fenómenos, cataclísmicos que han azotado al planeta tierra y al género humano y toda forma de vida en el mismo ,en su devenir histórico y que, según esta información ,se repiten cíclicamente, por lo que debemos cuando menos someterlos a un análisis, considerando que nuestros actuales científicos y expertos no han encontrado sus causas y de esta manera, buscar las posibles formas de soluciones que deben o deberán tomarse a nivel global.
El Autor
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Algunas de estas fotos son de autor anónimo y fueron tomadas con fines de investigación y sin fines de lucro (Pueden tener derechos de autor)
Las glaciaciones, el calentamiento de la tierra, el efecto invernadero, el agujero en la capa de ozono, la corriente marítima "El Niño", el incremento en el nivel del mar, la desertificación progresiva, el abatimiento de los niveles de agua potable, el deshielo de las masas polares y glaciares del planeta, las fuertes presiones de las corrientes migratorias humanas huyendo de la desertificación, hacia mejores posiciones geográficas del mundo para su sobre vivencia; son tan solo algunos de los picos que destacan en el horizonte del futuro y de la actualidad, que estamos viviendo y que se perfilan muy marcadamente en el cortísimo, mediano y largo plazo.
He sentido la tentación de describir puntualmente la memoria escrita de nuestros antepasados con el fin de remarcar y puntualizar lo que en esta investigación deseo poner a su consideración, pero también, mi fuero interno me aconseja que es una situación ociosa, pues la mayor parte de la gente con una mediana, inclusive incipiente preparación educativa, ha escuchado o leído del diluvio bíblico y del hundimiento de la Atlántida, entre los más famosos; para otros más estudiados, existe la epopeya de Gilgames, además de que en casi todos los países del mundo existen tradiciones y leyendas que mencionan catástrofes y diluvios, que han causado estragos, exterminado a gran parte de la humanidad en épocas remotas.
Sin embargo, a pesar de tanta información que de alguna manera ha llegado hasta nosotros, como un eco desde ‚ esas remotas edades, no la hemos podido descifrar y poner en un lenguaje y comunicación asequible y entendible, que nos sirva para en lo posible ponernos a resguardo como humanidad y en lo individual.
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Tal parece que estamos condenados a tropezar con la misma piedra, o sea casi desaparecer como humanidad, perdiéndose la civilización y sus logros científicos y tecnológicos, que finalmente quedan bajo los escombros de una naturaleza, cuyos fenómenos cíclicos no hemos sabido comprender y sortear y tal parece que con esta civilización acontecerá exactamente lo mismo, que les pasó a otras civilizaciones que ahora en forma imprecisa y nebulosa conocemos como "civilización de NA", de "MU", de" RA", de "MA" de "LEMURIA" y la "ATLANTIDA", nos suena increíbles, extrañas, inverosímil, tema de chiflados; sin embargo el planeta entero está lleno de figuras, esculturas y grandes monumentos, por citar tan solo algunos; mencionaríamos las pirámides de Egipto y su esfinge, las construcciones del Perú anteriores a los Incas, Tiahuanaco en Bolivia, Teotihuacán en México y las construcciones mayas en Centroamérica y México, otras en China, Polinesia y África; en fin ,existen vestigios humanos en lugares increíbles como por ejemplo, bajo tierra, capas de hielo y bajo el mar.
Sin embargo, en forma altanera y soberbia seguimos creyendo que nadie antes que nosotros como civilización ha avanzado tanto en el conocimiento universal; hemos lanzado ingenios espaciales más allá del sistema solar, puesto objetos en la superficie de la luna, en Marte, Júpiter y Venus y acercamientos hasta en el cometa Halley, avances en otros muchos campos como es la aero-navegación la medicina, la ecología, la agricultura, el control parcial de los fenómenos atmosféricos, las telecomunicaciones, el teléfono ,la televisión, el Internet, la clonación, la cibernética, los trasplantes orgánicos, la genética, la tomografía, la sonografía, los rayos “X” y láser, la microcirugía, la biotecnología; en fin, hemos avanzado espectacularmente más en los últimos cincuenta años que en los últimos cinco mil años o al menos así nos parece a nosotros.
Foto cortesía Cosmos Carl Sagan
Manuscrito astrológico Alemán hacia 1450
Pero, aquí cabria la siguiente pregunta, ¿Quién o quiénes o qué‚ pueblo de la antigüedad dio el nombre a muchas de las estrellas que dan forma a las figuras del zodiaco?, cuyo significado ha estado bajo la guarda y custodia de contados y especiales guardianes de su contenido; nadie que se sepa, sabe con certeza la respuesta a esta pregunta: muchos mencionan que los inventores fueron los caldeos, sumerios, egipcios e hindúes, pero la pregunta y su respuesta siguen ahí.
En estos mapas estelares de acuerdo a éste investigador, se ha encontrado que está la clave de la respuesta a los fenómenos naturales, que acabaron con grandes grupos humanos y que por la información científica aportada por el zodiaco, se a determinado que grupos humanos han existido cuando menos desde hace más de 25/30,000 años antes del presente.
Fácilmente se puede sin darse uno cuenta caer en el terreno de la suposición, la divagación y la especulación; por lo que entraremos de lleno a lo medular de éste trabajo, mencionando que uno de los zodiacos más bellamente construidos en la antigüedad es el del templo egipcio de Hathor, también‚ conocido como de Denderah, al que algunos expertos conocedores le estiman una antigüedad de aproximadamente catorce mil años, este extraordinario zodiaco fue esculpido en piedra y se encuentra en exhibición en el museo francés "Louvre" en París.
Foto tomada con fines
de investigación y sin ánimo de lucro de la página electrónica :
http://chesanahistoriarq.blogspot.com/2009_10_01_archive.html
Esta es una muestra clara de el avance científico en la astronomía, alcanzado por la civilización que lo construyó, pues en el mismo se describen entre muchos otros datos e informaciones de los astros y las galaxias, la duración del " Gran año zodiacal" que de acuerdo a informaciones obtenidas, le daban una duración de 25,800 años solares. Conocían la eclíptica, así como los solsticios y equinoccios de ese Gran Año, que al igual que el año solar, tiene sus cuatro estaciones, que se producen en el equinoccio de primavera, el solsticio de verano, el equinoccio de otoño y el solsticio de invierno.
El como llegaron a dominar estos conocimientos tan precisos, para los cuales se requiere de una alta tecnología, de paciente observación a través de potentes telescopios y delicados instrumentos; en verdad que es un misterio, sin embargo ahí están los hechos.
Es precisamente aquí, donde estos grandes maestros de la ciencia teórica y aplicada nos están diciendo desde hace miles de años, el porqué de los cambios climáticos que periódicamente afectan no solo a nuestro planeta, sino a todo nuestro sistema solar.
Foto cortesía del
INAH, con fines de investigación y sin fines de lucro (Puede tener derechos de
autor)
Otro famosísimo calendario en piedra, que nos está dando la misma información, inclusive mencionando con otras figuras y otra datación numérica, los mismos puntos astronómicos al igual que el zodiaco de los egipcios en lo referente a los solsticios y los equinoccios, como "Eras de destrucción del mundo o la humanidad"; es el calendario Azteca mejor conocido como piedra del sol.
Imágen cortesía de E.Raymond Capt "La Gloria de las Estrellas"
El zodiaco y su mensaje
También es importante mencionar que en varios libros que manejan estudiosos de la cultura egipcia como Andrew Tomas y Wait G. Dovan, este último en su libro las Terroríficas Profecías de La Gran Pirámide, mencionan un papiro traducido al árabe en el siglo noveno, en el que se indica la fecha o época zodiacal en que ocurrió el cataclismo que sumergió a la Atlántida.
"El diluvio debía tener lugar cuando el corazón de leo (la estrella Regulo o Régulus que es la más importante de éste signo astrológico) entrara en el primer minuto en la cabeza del símbolo astrológico de cáncer".
Igualmente el libro de los mayas, El Popol Vuh, menciona," una inundación fue producida por el corazón del cielo; un gran diluvio se formó”; (ver páginas 30,31,32 del citado libro por Adrián Recinos de la editorial Fondo de Cultura Económica); aquí el autor claramente interpreta que se están refiriendo los mayas también al símbolo astrológico de leo y la estrella que nosotros conocemos como "Régulus o Regulo" que es la más importante de este símbolo astrológico y según estas remotas fuentes en esos tiempos marcaba el punto vernal o equinoccio de primavera del Gran Año Zodiacal de 25,800 años solares.
"El diluvio debía tener lugar cuando el corazón de leo (la estrella Regulo o Régulus que es la más importante de éste signo astrológico) entrara en el primer minuto en la cabeza del símbolo astrológico de cáncer".
Igualmente el libro de los mayas, El Popol Vuh, menciona," una inundación fue producida por el corazón del cielo; un gran diluvio se formó”; (ver páginas 30,31,32 del citado libro por Adrián Recinos de la editorial Fondo de Cultura Económica); aquí el autor claramente interpreta que se están refiriendo los mayas también al símbolo astrológico de leo y la estrella que nosotros conocemos como "Régulus o Regulo" que es la más importante de este símbolo astrológico y según estas remotas fuentes en esos tiempos marcaba el punto vernal o equinoccio de primavera del Gran Año Zodiacal de 25,800 años solares.
Grabado de Alberto Durero, cortesía de libros TIME LIFE, Las Grandes Épocas de la Humanidad “La Edad Dorada de la Exploración, con fines de investigación y sin fines de lucro, con adaptaciones de de las investigaciones de Víctor Manuel García Reyes.
Ahora también contamos con gráficas zodiacales de la edad media, que inclusive marcan los símbolos zodiacales en medidas de 30 grados cada uno, lo que hace que el Gran Año cuente con 360 grados en su Elíptica, que a la vez consta de 12 símbolos zodiacales o sea que 30 grados por 12 símbolos es igual a 360 grados y cada grado equivale a 71.666669 años, que por 360 grados nos da un total de 25,800 años solares.
Lo interesante de este asunto, es que se nos está avisando, que cada 6,450 años solares, se producen trastornos climáticos a nivel planetario.
Aquí cabe recordar los comentarios del sabio griego Platón que mencioné en sus famosos "Diálogos" "... ciertas perturbaciones en el movimiento de los cuerpos celestes ocurren periódicamente causando las destrucciones..."; como se puede observar en la antigüedad conocían de la periodicidad de estos eventos cósmicos pero, parece ser que los más catastróficos ocurren cada 12,900 años o sea cuando se da el equinoccio de primavera mismo que ya ocurrió, hace aproximadamente 12,000 años en que nuestro sistema solar se ubicaba en la "Casa del símbolo zodiacal de leo", que es cuando los científicos y glaciólogos han determinado que la "Glaciación Wisconsin" inició su proceso de deshielo, conocido desde el punto de vista de la religión cristiana como el famoso "Diluvio Universal".
Posteriormente ocurrió otro gran desequilibrio climático en la era o símbolo zodiacal de "Taurus", conocido entre algunos investigadores como mediano diluvio ,esto se dio, cuando el sistema solar se ubicó en esos tiempos en esa "casa zodiacal" y marcó directamente su principal estrella denominada "Aldebarán", aquí es cuando se inició el solsticio de verano que incrementó y arreció el tremendo calor y sequía que aún no termina y que sabiamente pronosticaron los sabios de la era antediluviana, quiénes habían dicho que " El fuego debía de surgir del signo de leo y consumir el mundo"; todo lo contrario de lo que había destruido su mundo que fue por agua y tremendos fríos que provocaron la glaciación Wisconsin.
Hasta aquí todo viene coincidiendo, de acuerdo a lo que nuestros antepasados nos dejaron dicho, por lo que este investigador, no está inventando o tratando de acomodar nada en una caprichosa interpretación personal, pues son varias las fuentes de información antiguas que no cabe la menor duda de que la lectura e interpretación de la información es válida y correcta.
De esta forma contamos ya con la información precisa de las cuatro estrellas marcadoras de los equinoccios y de los solsticios que son: Régulus en leo, Aldebarán en Taurus, Antares en Escorpio y Fomalhaut en Acuario.
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El asunto ahora es cuando la flecha del reloj cósmico apunta en el inicio del siguiente desastre natural que se nos avecina.
Lo que sabemos es que la estrella marcadora se encuentra en el símbolo de acuario y se llama Fomalhaut encontrándose ésta en el tercer grado inicial de este símbolo zodiacal de acuario y equidistante en línea recta con la estrella marcadora del símbolo de Leo, que es Régulus, por lo que si cada grado como ya lo indicamos equivale a 71.666669 años solares, en los tres grados serían 215 años, para llegar a ese punto crucial, solo que a esta cantidad de años habrá que restarle los años que han transcurrido desde el tiempo en que realmente este símbolo de acuario entró en vigor.
Algunos aseguran que fue el 1945, otros en 1955 y otros más en 1965, por lo que llegando al extremo o sea al año de 1945, ya han transcurrido 53 años de los primeros 71.666669 años por lo que le restarían 162 años para llegar al punto de cambio o de situación climática fuera de nuestro control.
Muchos podrían decir, "bueno no importa, al fin y al cabo ya no existiré en ese momento", pero claro, existirán nuestros descendientes, los hijos de nuestros hijos. La pregunta es ahora, ¿Qué es lo que debemos de hacer?
Pero antes de pasar adelante si lo habrán notado, es necesario saber, qué es lo que motiva estos cuatro cambios climáticos.
Pues bien, en los años de investigación del autor, éste observó que estuvo muy cerca del conocimiento madame H. P. Blavatsky, en su libro, Isis sin Velo y el famoso astrónomo e investigador Carl Sagan, este último en su libro Cosmos, atribuye las glaciaciones y los grandes cambios climáticos a la interposición de grandes masas de polvo cósmico entre nuestro planeta y el Sol.
Desde luego lo planteó como una Idea Intrigante aunque quizás no muy probable, ver página 252 del citado libro y por lo que se refiere a madame Blavatsky, casi da con la causa y motivo de las cuatro estaciones zodiacales, que inclusive las menciona en su libro Isis sin Velo en las páginas 114,115 y 117, aunque ahí se menciona el gran año con duración de 24,000 años solares en lugar de los 25,800 que se ha determinado en forma más precisa, así mismo en la página 113 del mismo libro (bajo el tema de Nerosos, Yugas y Kalpas) menciona al invierno del año heliaco o Gran Año, como Cataclismo ó Diluvio y al verano que lo conocían como Ecpirosis.
Así mismo y en la página 355 del citado libro viene una explicación de tipo místico-religiosa con diagramas del mismo tema, desde el punto de vista hindú y judeo-cabalista, donde se describen las destrucciones periódicas en forma únicamente comprensible desde el punto de vista filosófico-religioso, pero vuelvo a insistir, no han mencionado hasta ahora nadie en forma clara y precisa la causa de estos cuatro cambios climáticos muy drásticos a nivel del sistema solar.
Bien, la causa es el movimiento de traslación del sistema solar, en función al acercamiento ó alejamiento en su recorrido de 25,800 años solares al punto focal de mayor radiación, calor y luminosidad, que es el centro de nuestra galaxia o nebulosa "La Gran Vía Láctea"
Foto cortesía con
fines de investigación y sin ánimo de lucro de: COSMOS-CARL SAGAN, pintura de
Jon Lomberg
Funcionando este centro a manera del sol que alumbra y calienta a nuestro planeta, pero en este caso, es a todo el sistema solar planetario.
La gran pregunta ahora, después de conocer está verdad que nos han transmitido nuestros ancestros es, ¿Qué vamos ha hacer?.
En lo personal considero que la respuesta está, en que todos conozcamos esta situación, muy grave por cierto y que entre todos encontremos la mejor solución, para que sean más los que se salven si este fuera la situación y no como en el caso de Noé y Gilgames y otros pocos que lograron salvarse.
Necesitamos verdadera hermandad, unidad, serenidad, decisión y armonía.
Lecciones de historia sagrada por FTD
Más que nunca necesitamos cuidar de nuestro entorno ambiental, del agua potable, de las emanaciones arrojadas a la atmósfera, de la reforestación, apoyándonos en la tecnología; que verdaderamente en esta ocasión, los avances científicos logrados, nos sirvan y apoyen en contrarrestar esta calamidad que se nos avecina, de acuerdo a los datos históricos que se han interpretado y analizado en la presente investigación.
Se ilustra la extensión de la Glaciación Wisconsin
Esta es la primera vez en que contamos con elementos de juicio que no habíamos considerado en la evaluación de los riesgos y fenómenos atmosféricos, que están afectando el clima a nivel mundial, el abasto de agua potable e industrial, mostrándonos que el efecto invernadero y el enorme hoyo que se ha presentado en la capa de ozono, así como la desertificación del planeta y el calentamiento anormal del agua de mar en la región ecuatorial, provocando en cadena efectos multiplicadores que nos tienen desconcertados, no los podemos, ni debemos atribuir únicamente como resultado de la responsable o irresponsable actividad humana .
Claro que esta situación es importante de considerar, tomando en cuanta estos nuevos elementos de juicio, que pueden y deben ser avalados y ratificados o rectificados por la ciencia actual, como pueden ser la historia, la arqueología, la astronomía, etc., entre otras, ya que todo indica que nuestros antepasados, tienen razón, no debemos, ni podemos negarlo a priori, revisemos y analicemos la visión y la lectura que tenemos de estos aspectos históricos y arqueológicos, como son ésas cartas estelares de fino conocimiento, como son:
El zodiaco de Denderah egipcio, el calendario Azteca, las leyendas y tradiciones mundiales, que nos hablan de desastres.
Así como los extraordinarios y excelentes zodiacos medievales, que se han tachado de seudo ciencia y superchería, así como de ocultismo.
La imagen fue tomada con fines de investigación y sin ánimo de lucro, de la página electrónica:
rubensada.blogspot.com/2008/07/los-cuatro-jin..
(Puede tener derechos de autor)
Todos los Derechos Reservados
Víctor Manuel García Reyes 2010
la Fuente y el respectivo Enlace. Torreón, Coahuila México.
